Ya llegó la Navidad

Como cada año, estamos escandalizados con lo rápido que ha vuelto la Navidad, y es que los meses nos pasan volando. Y eso a pesar de que llevamos unas semanas trabajando algunos diseños navideños para algunos de nuestros clientes. Pero de forma inesperada, los buzones se nos han llenado de catálogos de juguetes y la televisión de anuncios navideños lacrimógenos que retratan rencuentros familiares y buenas acciones y cuyo contenido se puede resumir en lagrimilla, Star Wars y familia.

Las marcas buscan el mayor impacto emocional posible basándose en dos premisas: su comunicación tiene que hacer sentir bien a su cliente potencial, con lo cual es imprescindible un final feliz, y por otro lado se reducen las menciones al precio u otras razones más racionales para la compra y se apela a lo intangible.

Los mejores anuncios

De los anuncios navideños de este año nos han llamado especialmente la atención estos tres:

El anuncio de la Lotería de Navidad ha tomado la delantera a Freixenet y lleva años siendo el spot navideño por excelencia. Este año no ha decepcionado y ofrece un capítulo más de buenas intenciones e historias entrañables.

El anuncio del aeropuerto londinense de Heatrhrow es sin duda nuestro favorito. Lo tiene todo: peluches, familia, reencuentros… tiene todo lo que se le puede pedir a una campaña navideña y es una buena apuesta de posicionamiento para la marca del aeropuerto.

Este último anuncio es de Duracell, una marca con un buen historial de anuncios llamativos. Para esta campaña navideña han mezclado La Guerra de las Galaxias con una historia emocional y el resultado no ha dejado indiferente a nadie, desde los que aseguran que es el mejor anuncio de la temporada hasta los que lo consideran un cóctel demasiado arriesgado.

Nosotros ya nos hemos mojado, ¿tú con cuál te quedas?