Al contrario de lo que se suele pensar, la solución a la mayoría de problemas en una organización no depende de más recursos: ni más dinero ni más tiempo. La receta mágica para conseguir soluciones eficaces y eficientes es la creatividad. Una de las herramientas más potentes para generar ideas creativas es el brainstorming.
El brainstorming o lluvia de ideas es una técnica mediante la cuál varias personas se reúnen para dar rienda suelta a su creatividad en relación a un reto concreto y comparten cualquier idea que les viene a la cabeza bajo una premisa básica: no se permite criticar ni rechazar ninguna idea, todo es bienvenido. De esta forma, se desactiva la autocensura y se consiguen muchas propuestas innovadoras que después se pulirán y darán excelentes resultados.
Sin embargo, cuando no tienes un equipo para hacer una lluvia de ideas parece complicado pensar desde otra óptica, ver las cosas de manera distinta y, por tanto, sacar conclusiones nuevas. Pero existe una solución: el brainstorming para 1.
¿Esta técnica se basa en hacer una lluvia de ideas nosotros solitos? No exactamente. ¿Se requiere a alguien más? No.
Para hacer un brainstorming solos lo único que tenemos que hacer es una trampa mental muy sencilla: meternos en la piel de otras personas, roles e incluso animales u objetos. Así, de forma aleatoria y según nos venga a la cabeza nos podemos preguntar:
– ¿Y esto, cómo lo vería mi hermana?
– ¿Y mis hijos/padres?
– ¿Qué haría mi jefe/trabajador?
– ¿Y mi cliente?
– ¿Qué opinaría Steve Jobs?
– ¿Qué haría Obama en esta situación?
– ¿Y un gatito muy mono?
– ¿Si fuera un leopardo, qué haría para solucionar esto?
– ¿Y si fuera un altavoz, qué haría? ¿Y si fuera un micrófono?
La lista es eterna… ¡adoptar otros puntos de vista te dará resultados sorprendentes! Será especialmente útil pensar como lo haría:
– Personas muy distintas a ti
– Personas que admiras (conozcas o no)
– Animales que tengan aquello que ahora necesitas
Desvelado el secreto, la clave es sencilla: para hacer un brainstorming para 1, lo único que tienes que hacer es dejar de ser una sola persona para convertirte en muchas, y dejar que cada rol que adoptes te impregne y genere nuevas y sorprendentes ideas.
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