El graffiti verde es una alternativa eco-friendly a los graffitis con pinturas hechas con químicos y muy a menudo tóxicas. Es un tipo de graffiti vivo, que respira, y que algunos consideran jardinería de guerrilla. Sin duda alguna, es una alternativa más sostenible y que puede convertir rincones urbanos fríos y grises en espacios llenos de creatividad y vida. Se hace con musgo, y para conseguir un resultado tan espectacular como el la foto (cortesía de webponce), solo hace falta un pincel, «pintura» de musgo y un poco de agua.
El proceso para crear tu propio ecograffiti es muy sencillo:
1. Consigue musgo (debe ser del que crece en superficies como las piedras, el de los árboles puede no funcionar).
2. Limpia el moho de tierra y raíces y pártelo en trocitos.
3. Rompe el moho en pedazos que puedas manejar y ponlos en la licuadora.
4. Añádele yogur, agua y azúcar y licua la mezcla de forma que quede consistente pero no gotee.
5. Diseña con tu pincel tu bonito graffiti verde y si no llueve, visítalo de vez en cuando para regarlo con un dispersor de agua.
¿Te animas a crear tu propia obra, como hizo la artista Edina Tokodi?
¡Feliz casi fin de semana!
Leave A Comment